Ir al contenido principal

Desatando lazos

Muchas veces estuve en lugares de donde tenía la sensación de no poder salir,en los que (creía) una fuerza mucho más grande que yo me ataba y retenía, frenaba mi crecimiento, ahogaba mi misión en la vida inexplicablemente... "No merezco esto" pensaba una y otra vez, sin quererlo yo misma me sumergía en la frustración, el miedo, la desesperanza y la resignación.
Después de batallar en vano y de huir otras tantas veces, he aprendido que una de las claves,uno de los cerrojos más potentes de esta situación era precisamente porque no sabía cortar el lazo, los grilletes que yo misma me había colocado, uno en cada tobillo, para no poder avanzar, para permanecer ahí hasta haber completado esa enseñanza.


Me empeñaba en embestir, en atacar, en maldecir mi suerte recorriendo mil veces una espiral de ira, agotamiento y resignación. Cada vez más vacía, cada vez más cerca de convertirme en una mujer gris.


Ahora sé que cuando quiera terminar con algo, he de mírarlo de frente. Observar las bendiciones que ha dejado en mí. La medida en la que me he superado, las barreras que he derribado, la sabiduría que queda en mí después de recorrer ese tramo.


Si consigues dejar algo bueno de tí allí, si honras esa experiencia, podrás marchar en paz. La vida abrirá una nueva puerta para tí, podrás estar tranquilo al saber que no necesitas repasar esa lección más adelante, no habrá ninguna otra puerta abierta que haga que la corriente cierre esa que anhelas.


Tendrás todo lo que deseas cuando estés preparado para recibirlo.


Cada vez que deshagas un lazo, estarás dejando el espacio para recibir un regalo.

Comentarios

  1. Inspirador!. Me encanta tu blog y me encantas tú!. Un beso muy grande!.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

"La mariposa recordará siempre que fue  gusano" Mario Benedetti Una de las primeras trampas en las que podemos caer durante el proceso de evolución personal es en la de creernos en disposición de predicar,intentar ejemplificar,o dar consejos u opiniones trascendentales a los que nos rodean (y que generalmente nadie habrá pedido) . Creo que ninguno de los grandes Maestros siguió esa filosofía. En mi opinión esta actitud sólo denota que tu ego , la imagen que quieres proyectar al mundo de tí, te está jugando una mala pasada. Si te dejas llevar por ese impulso de evangelizar todo aquello que tocas seguramente terminen tachándote de pretencioso, pedante o en el peor de los casos de insoportable. Si necesitas que los demás te vean grande, quizá haya algo dentro de tí que se sienta pequeño .  Por mucho que hayas evolucionado a lo largo del camino, recuerda siempre que hubo un momento en el que estuviste en el punto de partida,  puedes haber recorrido un largo trecho o no t

"Perdónaselo todo a quien nada se perdona a sí mismo." Kung FuTse, Confucio

Creo en el perdón. Soy capaz de dar mi perdón, de olvidar tremendas heridas, de afrontar y cargar con traumas de los que me responsabilizo como única dueña; puedo trabajarlos, transmutarlos, liberarlos. En definitiva he aprendido a limpiar, coser y mimar mis heridas, sé amar mis cicatrices y contar serena sus historias, sabiendo que yo soy la que soy a través de ellas. No culpo, no señalo,y no cargo contra nadie pues tengo la certeza de que todo lo que me ha sucedido a lo largo de los años, fue elegido por mí misma y siempre, siempre, siempre, protegida ( y por esto doy gracias ) porque a veces estuve en el filo de abismos oscuros y fríos a punto de ser alcanzada por garras negras, cuando una fuerza invisible sopló para desplegar mis alas e hizo que encontrara la forma de volar.   "El perdón es la fragancia que derrama la violeta en el talón que la aplastó." Mark Twain Pero, ¿y cuándo el perdón es entendido como inmunidad? Perdonar a quien cada día te hunde

"En la bandera de la libertad bordé el amor más grande de mi vida." Federico García Lorca

El amor no ha de ser una cadena, el amor es libertad, no debemos permitir que nuestros afectos nos conviertan en esclavos. La desconfianza deforma el amor. El miedo deforma el amor. El rencor deforma el amor. No podemos empeñarnos en vivir nuestra vida al lado de alguien a quien no hemos perdonado algo, por mucho que lo hubiéramos amado o por mucho que en el fondo, lo amemos en el presente. No es sano. No es justo. Estoy segura de que el verdadero amor trasciende cualquier situación y deshace cualquier nudo , no obstante también tengo la certeza de que si el corazón está herido, su necesidad de auxilio ha de estar por encima de todo.  " Nadie puede amar sus cadenas, aunque sean de oro puro." I. Heywood No huyamos del proceso. Tomémonos nuestro tiempo para depurar los residuos de situaciones que nos han dañado, vivamos nuestros procesos de interiorización, lamiendo nuestras heridas sea cual sea su manifestación externa (lágrimas, distancia, ira, silencio…) y renazcamo