Cuando nos cruzamos con alguien por la calle, cuando coincidimos con gente en la cola del supermercado o sencillamente ocupamos el mismo autobús estamos cerca de personas a las que por lo general, nisiquiera nos molestamos en mirar a la cara.
Detrás de todas y cada una de esas personas hay una historia, un camino, por muy rudos que parezcan, por mucho que disten de nuestra forma de hacer o de ser.
Ellos también tienen un gran espíritu, por mucho que a nuestro parecer vivan a oscuras; no nos corresponde ni a tí ni a mi juzgarlo. El respeto y la empatía se hacen necesarios. Es un buen momento para trabajar la compasión.
Un buen momento para anclarnos en nuestro centro, sin excusas... lo de fuera, simplemente es afuera.
"Si conociéramos el verdadero fondo de todo tendríamos compasión hasta de las estrellas."
Graham Greene
Aspira a hacer grandes cosas, pero no te olvides de las cosas pequeñas...
ResponderEliminar